Otro lugar simbólico que hay que ver en Valencia es la Catedral de Santa María de Valencia, con su famoso campanario, el Micalet o Miguelete.
El Santo Cáliz del siglo I, que se cree que es el que usó Jesús en la Última Cena, se encuentra dentro de esta catedral de estilo gótico construida en el siglo XIII. Los frescos renacentistas pertenecientes al siglo XV y descubiertos hace pocos años, son otras de las maravillas de la catedral.
En el museo de la catedral podrás observar diferentes obras de Goya. Para acceder al Miguelete, tendrás que subir los 200 escalones. Merece la pena con creces, obtendrás las mejores vistas de la ciudad desde arriba.
A través de la Plaza de la Reina, otra de las plazas más famosas y concurridas de la ciudad, puedes entrar en la Catedral.
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